En un esfuerzo por impulsar la reconciliación entre la urbanización, la cultura y la
naturaleza, así como restaurar y preservar el ecosistema xerófilo del Pedregal del
Xitle, al sur de la Ciudad de México, se inauguró el vivero especializado de la Zona
Arqueológica de Cuicuilco (ZAC), el primero en su tipo en lo que fue una urbe
prehispánica. Cuenta con 7,500 especies, entre árboles, arbustos y herbáceas nativas o endémicas de la región.
El biólogo Jerónimo Berruecos Frank refirió el Pedregal del Xitle es un ecosistema
volcánico único, con gran valor ecológico, hidrológico, cultural y educativo, el cual
alberga una biodiversidad que regula el ciclo del agua, gracias a su alta
permeabilidad, y además protege los vestigios arqueológicos.



Fotos: Especiales / Eikon.com.mx
